El Papa no pide perdón porque no había nada que perdonar

El discurso del Papa el pasado 12 de septiembre en la Universidad de Ratisbona (Alemania) ha puesto de manifiesto, por una parte, la enorme distancia que separa al catolicismo de la interpretación integrista del Islam; pero desde el punto de vista político lo más notable de la polémica ha sido la manipulación interesada de las palabras de Benedicto XVI en los propios países occidentales.