Zapatero: cajas y buenos negocios privados con dinero público

Por Pascual Tamburri, 26 de febrero de 2008.

Antonio Catalán, asesor de Zapatero, acaba de recibir 33,5 millones de Sa Nostra. No es la única Caja de control político metida en empresas ambiguas. Como las del dueño de AC Hoteles.

Sa Nostra, la Caja de Ahorros de referencia de las Baleares, posee ahora el 5% de AC Hotels a través de su sociedad de inversión Invernostra, por el módico precio de 33,5 millones de euros. No es mucho si lo comparamos con los 105 millones de beneficios en 2007 y con los planes imperiales de convertir los hoteles AC en líderes de su segmento de mercado. Pero la noticia –que a Navarra ha llegado gracias a la sección semanal de noticias que María Antonia Estévez publica cada domingo desde Madrid- afecta a los navarros y, sobre todo, tiene sus aspectos inquietantes.

La navarridad de la cosa la aporta Antonio Catalán, dueño del 60% del grupo que lleva su nombre. Son públicos y conocidos, también, los nombres de los demás accionistas, que comparten Consejo con el corellano y con la Caja balear. Antonio Catalán, como cada semana nos recuerda Estévez, es navarro, además de empresario y antes que millonario. El hostelero, aunque se haya definido más de una vez ajeno a la política, vive muy cerca de ella: hace más de un año que apostó por la separación entre PP y UPN, es amigo tanto de Miguel Sanz como de José Luis Rodríguez Zapatero, sirvió de puente entre ambos para que los socialistas navarros en el verano de 2007 permitiesen un muy condicionado Gobierno del centroderecha –el «pacto de Santo Mauro»-, aspira a apadrinar y tutelar la presencia navarra en Madrid en especial desde la muerte de Javier Lizarza y, ahora mismo, es asesor económico del PSOE en la campaña. De acuerdo, político no es, pero lo disimula muy bien, porque decir que «nuestros datos económicos son buenos» es…bastante político.

Así que tenemos a un reputado asesor económico de Zapatero, bien relacionado en su propio terruño, recibiendo una inyección de Sa Nostra, cuya Comisión Ejecutiva se forma así: «2 representantes de los impositores, 2 de los ayuntamientos, 2 de la Junta de Patronos, 1 de los consells insulares y 1 de los empleados». Esto, en una Comunidad donde el PP no manda porque todos se unieron para evitarlo y donde, como en todas las partes, las Cajas dependen de los políticos. Dinero con gestores públicos para sociedades privadas: todo legal, todo legítimo pero quizás algo antiestético ¿no les parece a ustedes? Al menos no es algo de lo que normalmente se presumiría.

Mientras tanto, unas cuantas Cajas de las 45 integradas en la CECA -Ibercaja, CAM, Caja Ávila, Caixa Sabadell, Caja Sur, Caja Insular de Canarias, Caja Vital, Caja Rioja, Caja Badajoz, Caja Murcia, Caja Burgos, Caja Círculo y, nuevamente, Sa Nostra- se han asociado en Concessia ¡para invertir en infraestructuras! y competir con los grandes concesionarios de obras públicas. Es decir, que Cajas con gestores públicos se unen para competir en la concesión de obras públicas por entidades públicas, eso sí con el dinero privadísimo de los impositores y los beneficios aún más privados que se generen. Legal, legalísimo, pero feo, ¿no?.

Dicen que la prensa anglosajona está atacando nuestro modelo de cajas y que Miguel Ángel Arias Cañete ha causado alarmismo hablando de sus problemas financieros. Bueno: quizás Antonio Catalán, una tarde que ZP vaya a recoger a Sonsoles a la piscina privada que AC le deja usar después del escándalo de Valdemoro, pueda explicarle que estas cosas no quedan bien. Eso sí, con conocimiento directo de causa.

Una noticia que parece buena: ni las Cajas vascas ni la de Navarra están en esa operación. He dicho que lo parece, no que lo sea, y es que estamos en la España de Zapatero. Quizás sea, como la de González y Carlos Solchaga, un lugar donde es fácil hacerse rico.

Pascual Tamburri Bariain
El Semanal Digital, 26 de febrero de 2008, sección «Ruta Norte».
http://www.elsemanaldigital.com/blog/zapatero-cajas-buenos-negocios-privados-dinero-publico-80079.html