Por Pascual Tamburri, 22 de abril de 2008.

Hace un año o algo menos, si ustedes se acuerdan, el PP era un partido triunfante, unido, que había sido capaz de ganar las elecciones municipales y que apuntaba ya a las generales. Todo era concordia. Mientras tanto, el PSOE navarro acababa de obtener un pésimo resultado autonómico, quedándose como tercera fuerza política tras unos abertzales con los que se había planeado hacer un «Gobierno de Progreso», y todo esto al borde de una vorágine de negociaciones secretas, discretas y mediopensionistas, con un Gobierno que mantenía sus relaciones con los etarras y con una UPN que había ganado sin ganar pero que buscaba, y encontró, buenas razones electorales y buenos padrinos además para domar a los socialistas. Estaban divididos y deprimidos.

Han bastado unos pocos meses para que las cosas cambien. Del PP poco hay que decir ya. El PSOE tiene vara alta en Navarra –la que se le deja tener, por lo demás- y, como el PP, tiene ante sí un Congreso. ¿Será para sanar heridas o para reabrirlas?

El IX Congreso del PSN se celebrará previsiblemente entre el 19 y el 20 de julio, por obvias razones la semana más pacífica del calendario foral. No es menos cierto que muchos trabajadores están de vacaciones, lo que puede introducir un sesgo en los compromisarios presentes. Por lo menos, si es fin de semana, Román Felones, presidente del PSN, no tendrá que estar con el alma partida, ya que son las fechas de la Semana de Estudios Medievales de Estella, pero sólo de lunes a viernes.

Los protagonistas y la Iglesia

Felones va a ser el gran protagonista de la cita, aunque él no quiera. Único consejero superviviente de la época de Gabriel Urralburu, fue también protagonista del giro estival de 2007, que les llevó del plan progresista a permitir la investidura de Miguel Sanz. Sin duda una jugada política arriesgada pero hábil, por parte del primero. A Felones le corresponde elaborar la ponencia política única del IX Congreso del PSN, para lo que contará con la colaboración de Guillermo Herrero, responsable del programa electoral en las últimas elecciones y como Felones catedrático de historia de Instituto. Serán apoyados por los diputados del Congreso Juan Moscoso y María José Fernández, los parlamentarios navarros Javier Monzón y María Victoria Arraiza, los concejales de Pamplona Jorge Mori y Maite Esporrín, además de Clara Irujo, secretaria general de la agrupación socialista local de Cascante.

Habrá sin duda un gran ausente, el difunto Carlos Chivite, y la necesidad de cubrir todos los cargos institucionales sin abrir heridas internas, además de la obligación de legitimar congresualmente el apoyo a UPN –sin renunciar en el futuro al poder en primera persona, con los socios que sea-; para este encaje de bolillos sin duda el hombre adecuado es Felones, que se crece en los momentos difíciles. Tendrá éxito, otra cosa es que se lo agradezcan.

Felones es un católico practicante, y ha aparecido más de una vez, recientemente, como tal. Bien, un tanto impregnado de una lectura discutible del último concilio y polémico con la Jerarquía como si se pudiese ser católico de otra manera. Pero será sin duda interesante ver cómo su fe se refleja en su tarea política, en un punto tan concreto y visible como una ponencia. La leeremos con atención.

Mientras tanto el PSN puede dedicarse a leer rótulos urbanos. Su penúltima hazaña ha sido pedir que el palacio de congresos «Baluarte» se rotule también en eusquera: sin duda era el gran problema que los navarros esperaban ver solucionado por sus políticos. Cobran buenos sueldos, muy buenos en realidad y sería bueno compararlos con los que cobraron en su último trabajo. Se lo podemos pedir al diputado Moscoso, mientras decide si pide que una de las calles que Barcina quiere renombrar se le dedique a su abuelo. ¿Qué fue un oficial golpista junto a Mola? Bien, pero el currículo progresista de su hijo y su nieto ya lo compensan. ¿O no?

Pascual Tamburri Bariain
El Semanal Digital, 22 de abril de 2008, sección «Ruta Norte».
http://www.elsemanaldigital.com/blog/veteranos-afines-iglesia-dirigiran-congreso-82227.html