Porque tenemos memoria, hay que recordar a todas las víctimas de ETA

Por Pascual Tamburri, 15 de julio de 2008.

Este lunes, 14 de julio, se conmemoró en Leiza el aniversario del asesinato de José Javier Múgica. El concejal de UPN murió a manos de ETA en 2001, y desde entonces los afiliados del lugar, la familia y algunos cargos públicos se reúnen para que no se pierda su memoria. Una magnífica iniciativa que cada año encabeza el presidente del Gobierno foral, Miguel Sanz.

Al acto de este año acudieron además otros políticos como Alberto Catalán, secretario general de UPN y portavoz del Gobierno de Navarra, el senador José Ignacio Palacios, José Antonio Mendive, alcalde de Barañáin y víctima a su vez de un ataque abertzale contra su comercio, el secretario general del PSN, Roberto Jiménez, y la delegada del Gobierno en Navarra, Elma Saiz. En el transcurso del acto Sanz se adhirió públicamente a otra iniciativa meritoria: «Me gustaría pedir a todos los alcaldes que dediquen en sus pueblos una calle o una plaza a las víctimas del terrorismo, para que no se olvide nunca por qué murieron a manos de los asesinos aquellas personas».

Una campaña similar, «Porque tenemos memoria», fue iniciada desde el diario La Razón por José Antonio Vera, y culmina este miércoles día 16 con un sencillo acto en la sede del mismo medio. Vecinos de Paz, Libertad Ya y la Fundación Leyre han sido las tres organizaciones navarras que han apoyado la campaña.

Y es que no se trata de un recuerdo aséptico. Todas las víctimas, por el hecho de serlo, merecen un recuerdo. El olvido, la división y el anonimato son objetivos de los asesinos abertzales, y las víctimas merecen ser recordadas por su nombre y por su causa. La misma causa que Pello Urquiola describió el lunes en vascuence al cantar que «Ibarretxe quiere llevar su plan por el camino equivocado y si no se le corta por lo sano nos puede complicar mucho la vida. Quiere dividir España y repartirla entre nacionalistas y malhechores. Pero nosotros queremos una sola España, una, grande y libre».

¿No hace falta poner los nombres?

Dicen que mi presidente dijo que «en aquellos Ayuntamientos que verdaderamente no quieran poner una calle, plaza o placa a las víctimas, en tono generalista –no hace falta poner los nombres– es que realmente en sus localidades no reina la libertad, la justicia y la paz». Sin duda la postura final de UPN matizará estas declaraciones hechas sobre la marcha y no contrastadas con el autor, porque todos somos conscientes que ocultar los nombres de las víctimas, avergonzarse de ellas o hacer distinciones entre «muertos de primera» como Caballero y Múgica y «muertos de segunda» como Atarés o Imaz sería dar la victoria moral a ETA.

Supondría tanto como admitir que alguna de las víctimas era de alguna manera culpable de algo. Como Miguel Sanz tiene una trayectoria impecable frente a la barbarie terrorista marxista y nacionalista es evidente cuál será su postura real. En este sentido, Alberto Catalán ha subrayado ya que «es de justicia reconocer todos los días del año y más en aniversarios como éste a todas y cada una de las víctimas del terrorismo para que no se sientan ni ellas ni sus familias olvidadas».

Todas y cada una, en efecto. Cualquier vacilación en este momento sería una derrota innecesaria, y por supuesto que Sanz no quiere una derrota para los defensores de la verdad y de la libertad, como dejó claro en 2001, al decir que «perdono pero no olvido y pido a este pueblo que no olvide que los asesinos están aquí«.

Pascual Tamburri Bariain
El Semanal Digital, 15 de julio de 2008, sección «Ruta Norte».
http://www.elsemanaldigital.com/blog/porque-tenemos-memoria-recordar-todas-victimas–85440.html