FFF: 30 años de historia, uno de dudas y una caja sin dueño

Por Pascual Tamburri, 9 de enero de 2009.

Un sainete entre socialistas y regionalistas siembra dudas de corrupción sobre varios nombres ilustres, alguno de ellos muerto. Triste comienzo para el 30 aniversario de UPN.

UPN celebra estos días sus treinta años de vida. Yo era muy pequeñito pero recuerdo vagamente cómo algunos hombres de la UCD y de fuera de ella, que como don Jesús Aizpún se negaron a votar la Constitución de 1978 en nombre de la Navarra foral y española, crearon esta exitosa sigla para defender sus principios dentro del nuevo régimen. Feliz cumpleaños, amigos. Desde entonces muchas cosas han cambiado: ha cambiado entre otras cosas el perfil (personal, profesional y moral incluso) del político de centroderecha en Navarra, y no estoy completamente seguro de que todos los cambios hayan sido para bien.

Coincidencia o no, los 30 años han coincidido con unos días de caras largas en el centroderecha (o mejor dicho en su ala regionalista). A la salida de UPN de sus concejales de Ribaforada –que plantearon una moción de censura contra la alcaldesa socialista, pese a la prohibición superior en nombre del «acuerdo de gobierno» entre PSOE y UPN- se ha unido lo de Cintruénigo; y allí ha habido de todo, por desgracia para la dignidad de nuestra democracia.

Del tráfico de influencias a la corrupción

Cintruénigo es un pueblo grande, industrioso y rico en la Ribera, cerca de Corella para que se sitúen los lectores de allende las mugas. En las elecciones municipales de 2007 UPN (entonces en pacto con el PP) venció pero sin mayoría absoluta, de manera que el socialista Adolfo Navascués, a pesar de no haber ganado, se hizo con la vara al frente de una coalición «de progreso» .

En las últimas semanas se ha filtrado reiteradamente, sin desmentidos documentados y con mucha verosimilitud, la noticia de un escándalo en la alcaldía cirbonera. Navascués habría favorecido a una persona próxima en unas oposiciones, y ante esa situación los concejales de UPN, respaldados por el Comité Local de su partido, se planteaban una moción de censura si el alcalde no dimitía por sí mismo. La cosa tiene su importancia tanto por el tamaño de Cintruénigo como por estar presidido ese Comité por Faustino León, antes alcalde y ahora parlamentario foral, siempre de UPN y de gran confianza personal con Miguel Sanz.

El presidente de Navarra y de UPN, sin embargo, se empeñó a fondo para evitar un enfrentamiento entre su partido y el PSOE, su socio presupuestario y parlamentario. Como en el caso de Ribaforada, UPN apeló a la disciplina de voto de sus concejales, pero éstos parecieron dispuestos a todo ya que el socialista Navascués se ha negado en todo momento a dimitir.

En realidad Navascués hizo más que eso. Acusó a su predecesor León de manejar una «caja B», con dinero desviado de la Mancomunidad de Aguas de Cascante, Cintruénigo y Fitero para «regalos a secretarios de partidos, viajes, cestas navideñas a funcionarios que tramitaban asuntos de importancia para Cintruénigo, atenciones a políticos…». Según un informe del secretario de la corporación del pasado junio quedaría «un saldo de 18.150 euros en la caja de la Mancomunidad», gestionada por el anterior alcalde y heredada por el actual, con gastos no cuantificados y no justificados, alimentada con recursos que en la Mancomunidad se computaban como trabajos realizados por el Ayuntamiento. En principio, Faustino León negó la mayor: «Yo me entero a raíz de que me comenta el secretario de que la Cámara de Comptos ha recibido el mismo informe que la Fiscalía, donde dice una serie de cosas el presidente de la Mancomunidad». León habría mostrado así su desconocimiento de la situación, pese a contradecirse esa versión con la acreditada por el secretario.

Si la cosa hubiese quedado ahí sería casi un empate, con Navascués acusado de prevaricador y León de corrupto. Pero León destapó una parte más del asunto, al admitir en un segundo momento la existencia de dicha caja y devolver la pelota al tejado del PSN. El creador de esta imaginativa solución contable habría sido el ya fallecido secretario general del PSN y senador del PSOE, Carlos Chivite. Chivite fue alcalde de Cintruénigo y presidente de la Mancomunidad de Aguas desde 1987 hasta 1995. Según el secretario estos fondos se crearon por orden de Chivite en 1989 y según León «se han pagado facturas de cuestiones que podríamos decir que son muy delicadas».

Consecuencias generales de un problema local

Más que delicado hay que decir que todo esto es peliagudo, porque las acusaciones cruzadas y no desmentidas hunden en el desprestigio a dos socios políticos, que por mal que se lleven en Cintruénigo gobiernan juntos en Pamplona. Los recelos locales han convertido en pública una trama de escándalos quizás pequeños en volumen pero preocupantes en estilo. Quizás por eso el presidente Sanz ha llamado al orden a los suyos y UPN de Cintruénigo ha renunciado a la moción de censura. Lo cual no evitará que Navascués tenga que explicar lo de las oposiciones y que los dos partidos –ya que Chivite ha muerto- tengan que dar razón de una contabilidad paralela que ya no se niega.

La mayoría de los navarros, como Miguel Sanz, no queremos que «Navarra y sus instituciones estén gobernadas por partidos que creen en el Amejoramiento del Fuero y en la Navarra foral y española». A diferencia del presidente, yo no estoy convencido de que el PSOE –que es el mismo de 2007- sea por entero uno de esos partidos. Contrariamente a la generosidad personal de nuestra derecha, acreditada en la fundación de 1979 y también antes y después de ella, la situación de Cintruénigo revela un nivel político que sin duda no era el querido por los iniciadores de UPN. Y eso es todo por ahora. Fantástica Fauna Foral.

Pascual Tamburri Bariain
El Semanal Digital, 9 de enero de 2009, sección «Ruta Norte».
http://www.elsemanaldigital.com/blog/anos-historia-dudas-caja–91612.html