Donde nacieron y se unieron todos los reinos de España, que ya existía

Por Pascual Tamburri Bariain , 9 de septiembre de 2011.

Durante ocho siglos, España vivió invadida y dividida. La Reconquista devolvió unidad, grandeza y libertad. Navarra fue protagonista de esa historia, aunque hoy duela a sus enemigos.

Durante ocho siglos, España vivió invadida y dividida. La Reconquista devolvió unidad, grandeza y libertad. Navarra fue protagonista de esa historia, aunque hoy duela a sus enemigos.


Juan Ramón de Andrés Martín, dir., Miguel Ángel Jusdado, Gonzalo Oliva Manso y Antonio Sánchez-Gijón, La gran aventura del Reyno de Navarra. Fundación y evolución del viejo reyno y sus relaciones con los actuales territorios vascos (712 – 1512). Prólogo de Luis Suárez Fernández. Esfera de los Libros, Madrid, 2011. 440 pp. 23,00 €

Lo que Juan Ramón de Andrés hace en este libro de La Esfera, que sin duda triunfará en otoño, es algo más y algo menos que una historia. Estamos ante una auténtica biografía de un sujeto colectivo, Navarra, a lo largo y ancho de ocho siglos de nuestro pasado. Es algo más que una historia, porque no es éste el trabajo profesional de un equipo de historiadores, es decir de investigadores científicos del pasado, sino el de cuatro narradores, o biógrafos, de un tramo de ese pasado que a todos los españoles afecta pero que no todos conocen. Y algo menos, porque renuncia a las formalidades académicas para hacerse accesible a todos los lectores.

Navarra está de moda. La Comunidad Foral es la presa codiciada por todos los nacionalistas vascos, y ellos usan una narración del pasado como argumento esencial tanto de su voluntad de anexionar Navarra –pese a la voluntad de los navarros y a la identidad de sus mayores- como de su proyecto de fundar un nuevo Estado antiespañol. Navarra es, además, campo de pruebas de distintos y dispares proyectos políticos, sea de dar esperanzas al socialismo, de buscar aliados etarras para el PSOE o de dinamitar la unidad de la derecha; y también para eso se esgrimen presuntos argumentos tomados de la historia. Como ha dicho últimamente Carlos Dávila, pero como también han dicho en los dos últimos siglos unos cuantos escritores, periodistas, políticos e historiadores, navarros y amigos de Navarra, siempre que España vive una crisis nacional Navarra y los navarros están en el centro de la cuestión. Eso hizo importante la historia y la personalidad de Navarra en 1808, en 1936, en 1975, y vuelve a ser así en 2011.

Hace unas décadas, si se quiere, el mayor problema de la historia de Navarra dentro y fuera de la provincia era la ignorancia ampliamente extendida, sumada al descuido de los investigadores profesionales. Unas cuantas ideas sobre el pasado se daban por buenas, a menudo rodeadas de lugares comunes, simplezas de eruditos locales y divulgaciones mediocres. Eso hizo daño, frente a la extrema izquierda y frente al nacionalismo vasco, a los defensores de la Navarra foral y española; y en el siglo XX-XXI las dos buenas noticias han sido la consolidación de una investigación científica brillante, de don José María Lacarra a don Ángel Martín Duque, y la aparición de una alta divulgación que llevó ese conocimiento a millones de españoles de todas las regiones.

Hoy el problema no está ni en la ignorancia ni en su extensión, sino en la difusión de la mentira, mentira interesada, mentira con intereses políticos, mentira consciente y con voluntad de destruir una identidad inventando otra. Lo que es peor, los difusores de la falsedad se fingen únicos poseedores de la verdad. Por eso es una excelente noticia que, precisamente ahora, La Esfera se sume a la batalla que es a la vez la de los historiadores, los periodistas y debería ser, pero no suele ser, la de los políticos.

El libro de Juan Ramón de Andrés plantea la cuestión central del pasado de Navarra: qué fue y cómo nació, creció y maduró el reino que fue de los pamploneses y terminó siendo de Navarra, desde la ruptura musulmana de la unidad de la España cristiana y visigoda hasta la reconstrucción de esa unidad por Fernando el Católico. En los ocho siglos de la Reconquista, los puntos de partida y de llegada son esencialmente similares, pero con una novedad decisiva, que perdura: España, al tiempo que recuperaba identidad, libertad y unidad, adquirió su variedad regional, de la que Navarra es parte crucial ayer hoy y siempre. Un experto en el asunto como don Luis Suárez, que ha dedicado algunos de sus trabajos a la Navarra medieval, prologa el libro precisamente con este espíritu.

Explicar eso al lector interesado es muy importante, en nombre de la verdad. Ya había empezado este recorrido La Esfera con los trabajos de José Javier Esparza sobre Asturias, y hay que reconocer que Esparza supo contarnos La Gran Aventura de Asturias sin la única pega que puede ponerse a este libro navarro, que es no tener en cuenta las últimas novedades de la investigación y de la cartografía, y dar una buena versión susceptible aún de matices marginales. Ante un 2012 en el que Navarra conmemorará a la vez las Navas de Tolosa, la unión a Castilla, la unidad de España… y un nuevo escenario político, es un buen momento para recordar aquellos ocho siglos de historia decisiva, y cómo fueron entonces, también, las relaciones con los vascos.

Pascual Tamburri Bariain
El Semanal Digital, 9 de septiembre de 2011, sección «Libros».
http://www.elsemanaldigital.com/donde-nacieron-unieron-todos-reinos-espana–116778.htm