¿Por qué cinco millones de parados tienen que pagar una ikastola?

Por Pascual Tamburri, 6 de febrero de 2012.

La extrema izquierda de Bildu, que gobierna Guipúzcoa, utiliza el dinero público para extender el euskera en Navarra. Una consecuencia más de una legalización suicida

El diputado general de Guipúzcoa, Martín Garitano, de Bildu, ha confirmado que su Diputación donará 24.000 euros a la ikastola Ibaialde de Lodosa (Navarra), en este caso a petición de la Asociación de Ikastolas. Dicen los promotores del euskera que el centro de enseñanza de la Ribera de Navarra se encuentra en una situación económica «grave», y suenan las alarmas en todo el entorno abertzale y afín para que se recaude el dinero necesario para que no quiebre. Eso sí, como no podía ser menos, los nacionalistas vascos de todo matiz, lugar y condición coinciden con el veterano líder batasuno en que «la situación que está viviendo esta Ikastola es directamente responsabilidad del Gobierno de Navarra, a consecuencia de su política lingüística«. Ni más ni menos.

La cosa tiene un motón de matices, pero como estamos todos cansados de décadas de lloriqueo quejoso de esta gente vamos a centrarnos en los aspectos más llamativos de la situación, dadas las circunstancias que vive la vieja y leal Provincia castellana, las que atraviesa Navarra y las que compartimos todos los españoles. Incluido, claro está, el ciudadano Martín Garitano, que se ve fuerte y quizá lo esté, dados los guiños que su facción y las afines reciben estos días desde Instituciones teóricamente muy lejanas (pero siempre muy calculadoras).

Dinero guipuzcoano para actividades en Navarra. Los contribuyentes guipuzcoanos, guiados por Bildu darán un euro por cada alumno de Guipúzcoa a la ikastola de Lodosa, lo que supondrá el total de 24.000 euros. Supuestamente Navarra es autónoma, y de hecho lo es antes y más que Guipúzcoa, y por diferentes razones que por cierto los nacionalistas y sus plumíferos no aguantan diez minutos en un debate. Esta acción, que rebasa los límites de la autonomía guipuzcoana y que por eso mismo podría y debería ser anulada por el Gobierno vasco y en su defecto por el nacional, es el peor precedente posible para quien diga defender la autonomía y la libertad de Navarra y de los navarros. Aparte de qué actividades se trate, Guipúzcoa, ni la Guipúzcoa gobernada por esa gente ni ninguna otra, no tiene derecho a inmiscuirse en la vida de Navarra.

¿Dinero público para centros privados? Resulta por lo menos divertido ver a los batasunos prosoviéticos de toda la vida, comecuras salvo que los curas fuesen también encapuchados (que de todo hemos visto), subvencionando un centro educativo privado. Eso sí, no quiero volver a oír ni a Bildu, ni Nafarroa Bai, ni a Geroa Bai, ni a Amaiur, ni por supuesto a ninguna variante del PSOE ahora anticoncordatario decir nada de los conciertos escolares navarros. Porque si los centros concertados navarros les pican tanto, por privados aunque prestan un servicio público, desde que ellos subvencionan una iniciativa privada o aplauden que se haga –y con dinero público- tendrán que callar.

La ley de la oferta y la demanda… cuando no hay demanda. ¿Los malvados fachas navarros están torturando la benéfica ikastola de Lodosa? Pues no. Lo que pasa es que los alumnos matriculados no bastan, no son suficientes, en suma es que no hay demanda suficiente de enseñanza en vascuence como para mantener un centro, según parece. Está claro lo que a día de hoy se haría con una empresa deficitaria en semejante situación. Otra cosa es que durante décadas (25 años en este caso, y más en otros) se ha generado la costumbre –que se ha creído derecho- de pagar con dinero de todos la subvención que suplía la demanda inexistente, hasta que a base de insistencia y propaganda se terminaba generando la demanda, muchos años después. Y esa historia, que tanto se ha repetido a cuenta de todos y que tanto ha cambiado las cosas –pero menos de lo que ellos creen y desean– es la que quieren repetir en Lodosa.

La irresponsabilidad del PSOE. El presidente del PSE, Jesús Eguiguren, y el presidente del PSN, mi amigo Román Felones, tendrán que decirnos si están de acuerdo en esto, y si es un paso hacia los «órganos comunes con Navarra» que parte del PSOE quiere, y otra parte nunca ha dejado de querer. Patxi López, último socialista gobernante salvo el presidente Griñán, tendrá que decir si lo aprueba o no. Porque, no lo olvidemos, López tiene una palabra que decir; pero todos los socialistas del PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero y de Alfredo Pérez Rubalcaba Faisán ya dijeron la suya, ya que si Bildu es legal y el batasuno Martín Garitano diputado general es porque ellos lo quisieron. Lo que pasa, esto también, es en parte responsabilidad de ellos.

Los perjudicados (o algunos de ellos). Dirán que es la «identidad cultural de nuestro pueblo» (pero parece que no la de los refractarios navarros); y habrá hasta tontos útiles que digan cosas del «camino de la paz», y así. Pero la verdad, la verdadera realidad, es que los abertzales, con aplauso de los socialistas, están gastando el dinero público en actividades de promoción de su ideología, en vez de gastarlo en combatir la crisis y ayudar a los parados, y además rompiendo la convivencia entre las instituciones. Tienen más de cinco millones de personas a las que explicárselo en España, cinco millones a los que decir que para ellos sus prejuicios abertzales son lo primero y principal.

Pascual Tamburri Bariain
El Semanal Digital, 6 de febrero de 2012, sección «Ruta Norte».
http://www.elsemanaldigital.com/blog/cinco-millones-parados-tienen-pagar-ikastola-119633.html