Por Pascual Tamburri, 2 de julio de 2012.
La crisis política se ha cerrado en falso, con la crisis económica acechando y la amenaza abertzale ante una puerta abierta. Se arrastran errores de una década.
Un fin de semana después de ser cesado por Yolanda Barcina, el martes 26 de junio y con coincidencia absoluta en los dos diarios impresos navarros, el exvicepresidente económico Álvaro Miranda dio las razones de su salida del Gobierno (que son las de la ruptura UPN-PSOE) en un escrito que tituló «Navarra es lo único importante«. Tiene razón el ingeniero Miranda en casi todo lo que dice, y la verdad es que le ha tocado enfrentarse a la vez con las miserias internas de su propio partido y con las envidias de sus socios de coalición, los socialistas de Roberto Jiménez. Nada para envidiar y sí quizá mucho que explicar a los ciudadanos normales que aún no entienden cómo se pasa así de rápido del amor al odio y del poder a la cesantía.
Dice Miranda, y tiene razón, que la «coalición entre UPN y PSN evidenció, desde el primer día, fuertes fricciones internas y numerosas algaradas externas«. Parece que de alguna manera él mismo se sentía o era señalado como causa de parte de esos tumultos, puesto que ahora explica que «en el pasado mes de febrero le propuse a la presidenta el planificar mi retirada ordenada del Gobierno«, y que si aplazó ese paso fue por la acumulación de tareas propias de su cargo e imposibles de transferir de golpe a un recién llegado. Entre ellas, la aplicación de los recortes presupuestarios obligados para toda España y, hasta el 7 de mayo, «el gravísimo problema de la fiscalidad de VW» .
El lector no navarro, y en buena medida el navarro, no sabe qué problema tenía o tiene con Hacienda la primera empresa industrial de la provincia. Había abierta una inspección de la Agencia Tributaria, no contra Volkswagen sino contra la Hacienda Foral de Navarra, porque desde 1994 la empresa alemana estaba siendo navarra a efectos de compras y catalana a efectos de ventas exteriores (a grandes rasgos), con lo cual Navarra habría estado ingresando el IVA de VW pero a los alemanes se lo habría estado devolviendo la Hacienda del Estado. Dicho así es un buen negocio, y de hecho lo fue durante muchos años y con muy diferentes Gobiernos en Madrid y en Pamplona. Curiosamente la Hacienda nacional empezó a presionar no cuando se supo o sospechó la cosa, sino mucho después, cuando Navarra se convirtió un obstáculo en los planes negociadores de José Luis Rodríguez Zapatero. Por supuesto son coincidencias, qué duda cabe, pero hay o había un acta de Inspección que podía ser de más de mil millones de euros para Navarra. Es verdad que era un gravísimo problema fiscal.
Lo era, sobre todo, porque si Navarra ingresa unos 1150 millones de euros por IVA al año, devolver a VW 360 millones es mucho más que todos los recortes habidos y por haber. Naturalmente esto explica, mirando una legislatura atrás, la fuerza de los consejos empresariales (de empresarios «amigos«… amigos del PSOE) que recibieron el Gobierno de Navarra y la UPN respecto a su posición en Madrid y a su relación con los partidos nacionales. Sólo con Mariano Rajoy en el poder Yolanda Barcina parece haber conseguido (aconsejada por Miranda, también en esto) que la Hacienda del Estado no mire atrás… aunque naturalmente querrá cobrar su IVA y no devolver el de los demás, en adelante.
Mientras todos pusiesen cara de no saber, la Hacienda navarra ganaba porque ingresaba; VW ganaba porque aquí pagaba menos; Hacienda no hacía más que perder. Como navarro, creo que en esto nos hemos jugado, a cuenta de improvisaciones a cortísimo plazo y personalísimos intereses, a la vez el fuero y el huevo. El huevo, que es una deuda abrumadora y la continuidad de VW. El fuero, porque nadie va a defender que tengamos una Hacienda privativa si la usamos así. Imaginemos qué habría dicho (y hecho) don Antonio Cánovas. Y, por supuesto, puertas abiertas a nuestros salvadores abertzales, cargados de razones. ¡Qué curioso que la coalición UPN-PSN haya venido a terminar justo cuando en Madrid, con una buena voluntad digna de mejor causa, se ha dado una solución al asunto y éste ya no se puede usar para coaccionar a ningún gobernante navarro!
Lo hechos son dos: Álvaro Miranda sale del Gobierno de Yolanda Barcina y lo hace dejando solucionados algunos problemas decisivos pero en franca crisis los ingresos de la Hacienda foral, que no por serlo es inmune a los males de este siglo. Recordando las bondades de la coalición socialista-regionalista, Miranda cree «que los ciudadanos de Navarra se merecen inexcusablemente una inmediata reconducción del conflicto político«. Sin duda, Navarra se merece un Ejecutivo sólido, estable y activo como lo tuvo, por ejemplo, durante los primeros 135 años de la vigente Ley de 1841; el espectáculo actual, u otros varios que hemos ido dando desde 1977, no es un buen servicio ni a los navarros ni a su Fuero. Ahora bien, dice el consejero saliente que «aquí la fábrica se llama Navarra, es propiedad de los navarros y navarras«, y que «aquí lo único importante solo es Navarra«. Y eso no es exactamente cierto. Navarra es, existe, porque es una parte de España. No hay servicio leal y válido a Navarra si no tiene en cuenta, y aun antes, el servicio a la nación. La «fábrica» no es tal, es un negociado de una gran empresa, si se quiere usar ese símil, ninguna de cuyas partes tiene sentido por sí misma, aunque funcione hoy con tanta autonomía como en uno u otro momento de la historia se haya creído bueno dejar.
Todos le deseamos un feliz retorno a su puesto de trabajo, señor Miranda, del que falta hace 16 años; pero también le pedimos que recuerde esto, tan sencillo, y es que España es antes que ninguna de sus partes, en el espacio y en el orden natural de las cosas. La patria común es también superior a los impuestos recaudados o no, que como todos los órganos del Estado, desde el último Ambulatorio a la mayor Universidad, están, como las regiones, al servicio del bien común. Que es el de España, y España sí es importante (no precisamente sólo por el fútbol).
Pascual Tamburri Bariain
El Semanal Digital, 2 de julio de 2012, sección «Ruta Norte».
http://www.elsemanaldigital.com/blog/unico-importante-navarra-espana-122584.html