Batasuna se beneficia electoralmente de la ilegalización

Por Pascual Tamburri Bariain, 13 de noviembre de 2002.
Publicado en El Semanal Digital.

Según las encuestas oficiales, Eta gana apoyos en Navarra, especialmente entre los jóvenes

Los partidos democráticos no crecen en intención de voto

La semana pasada se dio a conocer en Pamplona el resultado del llamado «Navarrómetro», la encuesta oficial anual sobre las opiniones y la estructura social de Navarra. Los datos dados a conocer sobre la intención de voto revelan una sustancial estabilidad política, incluso después de la aprobación de la Ley de Partidos Políticos. De celebrarse hoy elecciones, UPN mantendría su supremacía con un 24,81% de intención de voto. El PSOE alcanzaría un 13,5%, 8,06% Batasuna, 4,75% IU, 3,5% CDN, 3,13% EA y PNV y 2,63% Aralar y Batzarre.

En términos parlamentarios, UPN y su candidato, el presidente foral Miguel Sanz, obtendrían entre 22 y 23 escaños (22 en 1999), PSN entre 12 y 11 (11), Batasuna entre 6 y 7 (7), IU entre 4 y 3 (3), EA-PNV 2 (3), CDN de 3 a 2 (3), Aralar 1 (0) y Batzarre 0 (1).

Entre los datos destaca la pérdida de una parlamentario por la coalición de EA y PNV (de 3 a 2) y la pérdida también del único que tiene Batzarre. Aralar, el otro grupo disidente de Batasuna, encabezado por Patxi Zabaleta, lograría un escaño. Antes de la aprobación de la Ley de Partidos, Aralar tenía una expectativa de 2 ó 3 escaños en Pamplona.

La encuesta no refleja sin embargo qué ocurriría en Navarra si Batasuna no concurre a los comicios por los dos procesos paralelos de ilegalización. Significativamente, el Gobierno Vasco sí excluyó de su encuesta del mes pasado al grupo etarra, de manera que las dos encuestas no son comparable. Todos los analistas coinciden en señalar que el voto de Batasuna se ha reforzado en estos meses y que se encauzará disciplinadamente en la dirección que determine la cúpula etarra. Los nacionalistas vascos «moderados» son los más interesados en una rápida ilegalización de Batasuna, que les permita ofrecer sus servicios y su apoyo a los «radicales».

La Ley de Partidos ha logrado eliminar ambigüedades en las posturas políticas. Cada vez más, vascos y navarros están llamados a otra y opinar a favor o en contra de Eta, a favor o e contra de un nacionalismo cada vez más unido. Sin embargo, el paso sucesivo, en orden lógico, es ofrecer a los nacionalistas un camino atractivo para que dejen de serlo.

¿Qué gobierno para Navarra?

La encuesta publicada no aclara quién será el próximo presidente del gobierno de Navarra. UPN, el partido regionalista asociado al PP, vencerá sin duda, pero sin mayoría absoluta. Frente a él, el PSOE plantea una coalición alternativa, de «progreso», incluyendo a comunistas, disidentes de UPN y nacionalistas vascos. En este caso, como ya cedió en anteriores experiencias, los nacionalistas reclamarían para sí la gestión educativa y cultural – su vieja baza a largo plazo – y todo lo relativo a las relaciones con la Comunidad Autónoma Vasca. El PSOE navarro o tiene unánimemente clara su lealtad nacional y constitucional.

Curiosamente, si se da este caso, pasaría a ser Álava y no Navarra el gran obstáculo en el camino de Ibarretxe y de Otegui. Sin Álava, como sin Navarra, los etarras no desean ir del brazo de Javier Arzallus.

La inquietud de los nacionalistas «democráticos»

La presidenta de EA, Begoña Errazti, ya ha puesto en duda la fiabilidad de la encuesta navarra, «porque, debido a la inclusión de Batasuna, la distorsión puede ser tremenda en los resultados finales con respecto a la realidad». La encuesta afirma que la coalición EA-PNV perderá un escaño al pasar de tres a dos. Errazti ha añadido que «es una encuesta que hay que tomarse con mucha relatividad y que no hay que creerse a pies juntillas, porque parte de una premisa que no se va a dar (que Batasuna se pueda presentar a próximas lecciones) y por ello es bastante relativa». EA PN han sido los partidos más afectados por la Ley de Partidos.

Por Pascual Tamburri Bariain, 13 de noviembre de 2002.
Publicado en El Semanal Digital.